Cuando comienza el enfriamiento, durante los primeros minutos, se suele sentir un intenso frío. Esta sensación pronto desaparecerá. Con algunos aplicadores, sentirá una ligera sensación de tirantez cuando se aplica la succión.

Después del tratamiento, puedes sentir un hormigueo mientras se masajea la zona durante aproximadamente 2 minutos. Los pacientes generalmente pueden volver a sus actividades normales después de la cita. En la sección ¿Qué esperar? encontrará más información sobre lo que ocurre antes, durante y después del procedimiento CoolSculpting®.

Durante la consulta inicial, tu médico especializado en CoolSculpting® te preguntará sobre tu historial médico para determinar si CoolSculpting® es adecuado para ti. Es importante informarle si padeces de crioglobulinemia, enfermedad por crioaglutininas o criohemoglobinuria paroxística, ya que no deberías someterse a CoolSculpting® si padeces alguna de estas afecciones.

Un médico especializado en CoolSculpting® te ayudará a crear un plan de tratamiento individualizado diseñado para tus objetivos. La duración del tratamiento CoolSculpting® variará según la cantidad de zonas que se vayan a tratar durante una visita. La tecnología más reciente de CoolSculpting® puede tratar a un paciente en 35 minutos. Si tienes poco tiempo pero tienes varias zonas con adiposidad no deseada, en algunas consultas se pueden emplear varios sistemas CoolSculpting® a la vez. Tu médico te explicará el proceso y determinará si esta es una opción adecuada para ti. Tú y tu medico también pueden programar tratamientos adicionales o visitas a la consulta para cumplir tus objetivos.

El procedimiento CoolSculpting® es completamente no quirúrgico, por lo que normalmente se puede volver a la actividad normal casi de inmediato. A menudo, los pacientes vuelven al trabajo directamente después de su tratamiento CoolSculpting®. Esto variará con cada persona y puede depender de la zona que se vaya a tratar.

Asegúrate siempre de programar una valoración de seguimiento con tu médico especializado en CoolSculpting® para revisar los resultados.

La mayoría de los pacientes ven resultados entre 2 y 6 meses después del tratamiento. Seguirá eliminando las células adiposas durante entre 4 y 6 meses después del tratamiento. La Galería de imágenes de antes y después muestra el aspecto de los resultados varias semanas después del tratamiento CoolSculpting®.

Durante el procedimiento, puede experimentar sensaciones como tirones, estirones, pellizcos leves, frío intenso, hormigueo, escozor, dolor y calambres en la zona del tratamiento.6 Estas sensaciones van desapareciendo a medida que la zona se adormece.

Tras el procedimiento, los efectos secundarios habituales suelen ser enrojecimiento, hinchazón, blanqueamiento, moretones, firmeza, hormigueo, escozor, sensibilidad, calambres, dolor, picazón, sensibilidad de la piel y entumecimiento. El entumecimiento puede persistir durante varias semanas. Puede aparecer una sensación de hinchazón en la parte posterior de la garganta después del tratamiento submentoniano. Estos efectos son temporales y generalmente desaparecen en días o semanas.

Aunque son extremadamente raros, también pueden producirse algunos efectos secundarios adicionales como hiperplasia paradójica, dolor de inicio tardío, quemaduras por frío, síntomas vasovagales, induración subcutánea, hiperpigmentación y hernia.

El procedimiento CoolSculpting® no es para todo el mundo. No debes realizarte el procedimiento CoolSculpting® si padeces crioglobulinemia, enfermedad por crioaglutininas o criohemoglobinuria paroxística. El procedimiento CoolSculpting® no es un tratamiento para tratar la obesidad.

Igual que con cualquier otro procedimiento médico, pregunta a tu médico si el procedimiento CoolSculpting® es adecuado para ti.

El precio de los procedimientos CoolSculpting® varía según las zonas de tratamiento, la cantidad de tratamientos necesarios y sus objetivos.

Cree un plan de tratamiento personalizado, con su médico de CoolSculpting® diseñado en función de su cuerpo, sus objetivos y su presupuesto.

El procedimiento CoolSculpting® no es para todo el mundo. No debes usar el procedimiento CoolSculpting® si padeces crioglobulinemia, enfermedad por crioaglutininas o criohemoglobinuria paroxística. El procedimiento CoolSculpting® no es un tratamiento para la obesidad. Igual que con cualquier otro procedimiento médico, pregunta a tu médico si el procedimiento CoolSculpting® es adecuado para ti.

Sí, el procedimiento CoolSculpting® puede tratar acumulaciones de grasa visibles debajo de la barbilla. La congelación de adiposidad de papada es tan tolerable como usar el procedimiento CoolSculpting® en otras partes del cuerpo (por ejemplo, abdomen, costados o muslos).

Una vez que las células adiposas tratadas se cristalizan (congelan), se destruyen y se procesan y eliminan de forma natural del cuerpo. Una vez que las células adiposas tratadas desaparecen, lo hacen para siempre. Echa un vistazo a la página ¿Cómo funciona? para obtener más información.

Como el tratamiento de reducción de la adiposidad no invasivo líder en todo el mundo, CoolSculpting® tiene un perfil de seguridad y eficacia bien establecido. Los sistemas CoolSculpting® son dispositivos de enfriamiento controlados diseñados con medidas de seguridad incorporadas. Si los sensores detectan que la piel se está enfriando demasiado, el sistema se apagará automáticamente.

El procedimiento de reducción de grasa CoolSculpting® está especialmente diseñado para aquellas personas que tienen grasa no deseada en zonas específicas. A diferencia de la cirugía para perder peso (por ejemplo, la derivación gástrica), el procedimiento CoolSculpting® no es una solución para personas con obesidad. Un buen candidato para el procedimiento CoolSculpting® tiene gorditos notables en ciertas zonas de las que les gustaría deshacerse. Muchas personas desean una alternativa no quirúrgica a la liposucción.

El primer paso que debes realizar es hablar con un médico especializado en CoolSculpting® para comprobar si es un procedimiento adecuado para ti.

El procedimiento CoolSculpting® puede tratar acumulaciones de grasa visibles en el área de papada (debajo del mentón), muslo, abdomen y flancos (gorditos o lonjas), junto con la adiposidad en el busto, en la espalda, debajo de los glúteos (también conocida como banana subglútea) y en la parte superior del brazo. Tu médico creará un plan de tratamiento personalizado adaptado a tu cuerpo y a tus objetivos individuales.